
Futuro con final abierto
El director del Instituto de Energía de la Universidad Austral, habló sobre la importancia del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner (GPNK) y lo que implica su inauguración para el país.
El director del Instituto de Energía de la Universidad Austral, habló sobre la importancia del Gasoducto Presidente Néstor Kirchner (GPNK) y lo que implica su inauguración para el país.
Estimado lector, gracias por acompañar en los últimos 20 años a la revista. He tenido el privilegio de escribir mis primeros artículos en la misma. La revista nació en un contexto macroeconómico donde se habían roto todos los contratos, la mayoría pactados en dólares; eran tiempos en donde el mercado energético se iba readecuando en consonancia con superávits gemelos.
Sin embargo, para mantener el crecimiento económico se lo comenzó a desacoplar del resto de las variables, mediante la intervención congelando toda la cadena de valor de la energía. Como se señaló varias veces a lo largo de distintos editoriales de la revista, el problema del sector fue siempre el cambio de las reglas de juego por la incidencia de la política y el manejo del poder de cara al electorado.
Analizando el devenir de la República Argentina, desde la finalización de la segunda guerra mundial, la política energética fue siempre volátil, nunca se consolidó como un recurso estratégico totalmente controlado por el estado, regulado o con libertad de libre disponibilidad por el sector privado.
Pasando la película en cámara rápida, así fuimos transitando desde los convenios con la Standard Oíl, porque no había disponibilidad de fondos, hacia una nacionalización de los recursos basados en el libro Petróleo y Política1, para pasar nuevamente a fines de 1959 a contar nuevamente contratos petroleros con empresas extranjeras y lograr el autoabastecimiento energético2. En 1960, Argentina tenía un PIB per cápita similar al de Austria, Italia, Japón y España.
Con la llegada de Arturo Illia, se anularon los contratos petroleros y se perdió el autoabastecimiento y la producción petrolera fue inferior al año anterior. Nuevamente el rompimiento de reglas llevó al fracaso de la meta soñada del autoabastecimiento y se tuvo que rectificar la política de anulación de los contratos ante la circunstancia de tener que recurrir a la importación de crudo importado.
Muchas compañías como Amoco y Cities Service decidieron continuar, pero la falta de confianza ya había sido marcada. Así, entramos en la época de la vuelta de Perón y la prosecución de la dictadura militar, para ese entonces Argentina tenía un PBI por debajo de Austria, Italia, Japón y España y el surgimiento de la denominada patria contratista sujeta al poder de turno y continuación de un sindicalismo prebendario preocupado por no perder ingresos de los aportes de los asalariados versus como recuperar los puestos de trabajos perdidos.
Fue el inicio del nacimiento y crecimiento de la economía informal, del trabajo en negro, y a la vez esclavo, donde los desempleados no tenían representación alguna, todo por no entender hacia donde se estaba dirigiendo el mundo con un crecimiento vertiginoso de la economía de la mano de la informática. Con el primer gobierno democrático instaurado, luego de la experiencia fallida de la dictadura militar, nace una nueva experiencia con YPF.
El Plan Houston, pretendió convocar nuevamente a inversores privados con experiencia en el terreno de los hidrocarburos y firmar contratos de asociación con YPF, habida cuenta que el gobierno de Alfonsín debió enfrentar entonces el problema de la renegociación de los contratos e YPF había sufrido una descapitalización, injustificado endeudamiento y pérdida de mercados, consecuencia en parte de la guerra de Malvinas.
1. Libro escrito por Arturo Frondizi, respecto al monopolio estatal del petróleo.
2. Cambié mi postura porque prefiero renunciar a una actitud intelectual irreal, que mantenerla en desmedro de los intereses del país. Ley 14.773
Arturo Frondizi
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