Advierten por un exceso global de GNL a partir de 2027: Argentina se prepara para exportar

El mercado mundial de gas natural licuado enfrentará una sobreoferta hasta 2030. El crecimiento de la demanda en Asia y el avance de proyectos en EE.UU. y Qatar marcarán el ritmo.

El mercado de GNL entra en una década de alta volatilidad, con precios a la baja y una competencia feroz por asegurar demanda. Para países productores como Argentina, el desafío será acelerar la infraestructura de exportación, asegurar contratos de largo plazo y captar inversiones estratégicas que le permitan posicionarse en un entorno altamente competitivo.

El sector de GNL se encamina hacia una etapa de sobreoferta estructural a partir de 2027, con un aumento significativo en la capacidad de licuefacción liderado por Estados Unidos y Qatar, según el informe "Global LNG Market Outlook 2030" de Bloomberg.

La producción mundial de GNL alcanzará las 594 millones de toneladas anuales (Mtpa) hacia 2030, un 42% más que en 2024, superando el crecimiento proyectado de la demanda, que escalará un 39% en el mismo período, hasta 578 Mtpa.

Este desbalance anticipa un contexto de precios más bajos, especialmente en los mercados asiáticos, donde se espera que los valores spot bajen a menos de 9 dólares por MMBtu hacia el final de la década.

“El exceso de oferta proyectado podría llegar a entre 8 y 30 millones de toneladas por año entre 2027 y 2030”, advierte Bloomberg, citando como factores clave los nuevos proyectos en construcción, las incertidumbres geopolíticas y las posibles decisiones regulatorias en Europa.

En ese escenario, Asia será el principal motor de consumo, con China, India y Tailandia liderando la absorción del excedente, principalmente desde el sector industrial y la generación eléctrica. Europa, en cambio, verá una demanda más estable, con un leve retroceso hacia 2030 por el avance de las renovables.

Argentina, de vuelta al mapa exportador
En este contexto de transformación del mercado, Argentina reaparece como potencial actor exportador. Según el informe, el país está desarrollando un proyecto de licuefacción flotante, que le permitiría reinsertarse en el comercio global de GNL hacia fines de la década.

El proyecto —ubicado en la costa atlántica y vinculado al desarrollo de Vaca Muerta— forma parte de una estrategia más amplia para monetizar los excedentes de gas natural no convencional, ante la falta de infraestructura doméstica para absorber toda la producción futura.

La licuefacción flotante, más rápida y flexible que las plantas onshore, se perfila como una solución viable para acceder a mercados como Asia y Europa, aprovechando el diferencial de costos y la cercanía a nuevos centros de demanda emergente.

A nivel global, más de 174 Mtpa de nueva capacidad de licuefacción están actualmente en construcción. Entre los proyectos más relevantes figuran Golden Pass, Plaquemines y Port Arthur (EE.UU.), así como la expansión del North Field en Qatar.

En América Latina, Brasil y Argentina destacan como los países con mayor proyección de crecimiento en consumo y exportación, respectivamente. Por su parte, Canadá y México avanzan con nuevos desarrollos que consolidan al continente como un eje clave del suministro mundial.

Sin embargo, el informe advierte que eventuales demoras en Qatar o un veto europeo al GNL ruso podrían cambiar el escenario, generando cuellos de botella o nuevos incentivos a la inversión.